La importancia de los cerramientos en la eficiencia energética

En la búsqueda de soluciones sostenibles con el medio ambiente a nivel doméstico, la eficiencia energética se ha convertido en el gran aliado. 

Una de las formas en las que se puede conseguir en un domicilio es a través de los cerramientos, que desempeñan un papel fundamental en el aislamiento térmico y acústico, favoreciendo también la conservación de la energía. 

Se entiende, en realidad, por cerramientos a las estructuras como las ventanas, puertas e incluso muros y techos. Estas estructuras sirven de barrera entre el interior y el exterior, y su correcto diseño y construcción pueden marcar la diferencia en el campo del ahorro y del confort térmico.

Aislamientos y luz: los aliados de los cerramientos 

El aislamiento térmico es uno de los aspectos más importantes que se consiguen con las soluciones de cerramientos. “Un cerramiento adecuadamente aislado permite reducir las pérdidas de calor en invierno y la entrada de calor en verano, lo que se traduce en un menor consumo de energía para climatizar los espacios interiores. Esto implica un importante ahorro económico y una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas al uso de sistemas de calefacción y refrigeración” explican desde Cerrajería Vefergal. 

Además del aislamiento térmico, también tienen importancia en el aislamiento acústico. Un cerramiento eficiente puede ayudar a reducir el ruido exterior, creando un ambiente interior más tranquilo y confortable. Esto es especialmente importante en entornos urbanos ruidosos o en edificios cercanos a fuentes de ruido, como calles con tráfico intenso. 

No hay que olvidar también su capacidad para seguir aportando a la vivienda luz natural. Un diseño adecuado de ventanas y puertas permite el ingreso de luz solar, reduciendo la necesidad de utilizar iluminación artificial durante el día. Además, hoy en día existen soluciones que permiten mediante toldos, reservar las horas de más sol en verano para evitar recalentar el interior a través de los vidrios. 

En la actualidad, existen tecnologías y materiales innovadores que permiten mejorar el resultado. Por ejemplo, las ventanas de doble o triple acristalamiento con rotura de puente térmico ofrecen un mayor aislamiento térmico y acústico que las ventanas convencionales. Materiales como el PVC, la madera tratada y el aluminio son las opciones más elegidas en lo que a materiales se refiere. 

“Un diseño adecuado y la elección de materiales eficientes pueden ayudar a reducir el consumo energético, disminuir las emisiones de gases contaminantes y mejorar el confort en casas, oficinas o entornos como restaurantes” explican.